Uno de esos días que compartes con amigos, mientras los peques juegan y corretean por el bar… Intentas seguir las conversaciones, aunque se hagan difíciles, pero cada vez más, lo vas consiguiendo 🙂 Esta vez ha sido con Gema, Sandra y Ricardo.
Gema Pintor (siempre hemos llamado a Gema con su apellido, supongo porque es supersonoro 🙂 ) es una de esas amigas que al principio la conoces de vista, pero que te das cuenta que compartes con ella mogollón de amigos. Y cuando tiras de recuerdos, aparece en gran cantidad de ellos… La verdad es que desde que ocurrió lo de Javi, se volcó mucho con todo, viniendo desde Dublin (la que es ahora su casa). Todo eso hace que la vayas cogiendo más cariño. Y siempre que vuelve por España, hacemos por vernos un ratito, porque siempre reconforta mucho. Además, al tener mellizos también, como que te une un poco más 🙂
Sandra y Ricardo, son esa pareja a la que conoces de siempre, pero que poco a poco se van colando en tu vida hasta convertirse en amigos por pleno derecho 🙂 Que yo recuerde llevan juntos desde siempre, y hacían una pareja estupenda, guapos los dos… Lamentablemente para Sandra, Ricky ha ido copiando mi peinado y esas cosas no sientan bien a todo el mundo 🙂
Bromas aparte, son una pareja estupenda con unos peques maravillosos. Y te unen cosas a ellos que no puedes olvidar. Porque Sandra y Ricardo estuvieron en el viaje a Sevilla que cambió mi vida para siempre. Ese puente de San José del 99 en el que íbamos a quemar las fallas, el cual tuvimos que replanificar para ir a Sevilla… Y allí estuvimos con Ana, mi amor platónico de siempre, y resumiendo mucho, dieciocho años y pico después, Ana y yo somos familia numerosa 🙂
Evidentemente, ese viaje que cambia tu vida, hace que las personas que te acompañen sean especiales. A Ana le vino muy bien que hubiera una chica en el grupo. Y Sandra es un encanto, supongo que todo ayudó a los posteriores acontecimientos 🙂 Pero es que te unen más cosas, al fin y al cabo Ricardo es hermano de Víctor… Así que podría poner a contar alguna caña que otra que nos hemos tomado en La Santana…
En fin, que se les quiere, porque aunque pase mucho tiempo sin vernos, todo sigue igual, todo es sincero y agradable… Porque cuando estamos con ellos, es como estar con la familia 🙂