Al igual que ayer, este post podría estar lleno de miles de tópicos y buenos deseos…
Pues mira, esta vez si quiero ser un poco previsible. Porque quiero desear todo lo bueno para este año que recién estrenamos. Porque es necesario empezar con una sonrisa y buenos deseos, perdonando los errores ajenos y pidiendo perdón por los propios. Porque todo punto de inflexión puede convertirse en un punto de apoyo para seguir adelante.
Así que, deseo que tengáis un feliz 2018 todos, especialmente a los que os molestáis en seguir este humilde blog, instagram, twitter, facebook, o por donde quiera que lo sigáis…
Y que mejor manera de reflejar los buenos sentimientos que tengo, es con los tres cachorros a los que dediqué la foto de ayer… Pero esta vez con ojeras por haber trasnochado y haber dormido mal, con las boquitas abiertas y sueño en los ojos, donde parece que me están pidiendo que guarde ya la maldita cámara y que vayamos de una vez a comer donde los abuelos… 🙂
Feliz 2018, de corazón, y que sigais viendo el blog, y os animéis a compartirlos y darle más veces a «me gusta» 🙂
PD: Qué difícil es sacar una foto buena de los tres, sin que salga movida, y que salgan todos bien, juas, juas 🙂