No me digáis que si le ponemos unas rejas a esta flor podríamos ilustrar aquella vieja canción de Antonio Molina: La rosa del penal…
Realmente, esta entrada se iba a llamar «La rosa de la tristeza», o «La rosa de la pena», debido a que el tono de los colores que yo veía en directo, me parecía una composición triste… Luego, a la hora de revelar, no me transmitía esa sensación… De hecho, me ha encantado el tono de los colores…
Es entonces cuando me he acordado del nombre de la canción, y me he dicho, «vamos a darle un homenaje al grande de Molina» 🙂