Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Carlos y César

Homenaje anual a Javi

Este sábado fue el elegido para quedar un rato y charlar sobre nuestro amigo. Esta vez, no estábamos confinados, y había terrazas abiertas, así que allá nos fuimos, un par de valientes y un servidor a echar un café, y hablar un ratito de del mítico Patillas. Ojalá que el año que viene podamos compartir con más gente este momento, este año, todo es entendible.

Entrañable, enriquecedor, emotivo, incluso tuvimos un ratito para felicitar a Víctor por videollamada, que fue su cumpleaños… Son esas pequeñas cosas que alimentan el alma, algo más que necesario en estos tiempos que corren. Los tres, Carlos, César y yo, entre castellanas y pacharanes, hablamos de Javi. Hablamos de la vida…

Carlos es un tipo singular. Un hombre culto donde los haya, es una persona que lucha por hacer del Arte su modo de vida. Y talento tiene. Dibujos, grabados, litografías, fotografías, y no podemos obviar sus composiciones de caras hechas con piedras, que para mí son auténticamente espectaculares. Os invito a que visitéis su blog lapiedradada.blogspot.com. Es un placer hablar con él, porque es un artista y una gran persona. Y ahora que volvemos a ser vecinos de barrio, quedaremos más a menudo… La culpa es mía, que todavía estoy necesitado de tiempo, pero el calor y el no tener cole harán que podamos vernos más a menudo, seguro, aunque sea mientas echamos una charla y un vistazo a los peques en el parque…

César es otra de esas personas irrepetibles que te encuentras en la vida. Hemos coincidido varias veces, tenéis una breve historia nuestra en la entrada «Delacava: La Cerámica», donde hablo de que fue mi central cuando yo era portero y jugábamos en El Chuletón, pero no dije nada de que también coincidimos en La Cima, abrigos de pana incluidos… Honesto donde los haya, consecuente con sus actos y sus palabras, podemos decir que es la antítesis de la palabra hipocresía. Ayer se lo dije, estoy seguro de que si el mundo tuviese muchas personas como César, sería infinitamente mejor. Maestro ceramista, os recuerdo que tiene un pequeño paraíso llamado Delacava, el cual no podéis dejar de visitar.

Dos grandes amigos con los cuales tuve el placer de charlar sobre otro grande, nuestro querido Javi… Siempre que podamos, deberemos seguir teniendo estos encuentros, porque como hemos dicho, enriquecen y alimentan el alma…

Carlos y César
Carlos y César