Es raro que todavía no haya empezado a abusar de mis fotos con flores. Es una de las cosas que más me gusta fotografiar, la verdad. Se están quietas, no cierran los ojos, y generalmente tiene colores muy bonitos. Me gusta jugar con los contrastes de colores y la profundidad de campo, para dejar todo el fondo desenfocado… Como es una de las primeras cosas que aprendí, abuso de ella 🙂
Ahí tenéis entonces la primera remesa. Prometo que habrá más, siempre es un buen recurso y queda resultón.