Otra de las tradiciones que no puede faltar es quedar con parte del ya extinto IconMedialab. El grupo de gente al que conozco es heterogéneo, pero hay uno de ellos con el cual quedo a comer una vez al año, casi siempre en diciembre. Casi. Con ellos este año ha sido en enero también. Como siempre, hemos ido a un chino cerca del metro de Menéndez Pelayo, y luego hemos tomado un café, esta vez en una terraza. Esta vez el grupo se reducía a solo cuatro personas.
A pesar de que ha pasado mucho tiempo desde la época en que trabajábamos juntos, y a pesar de que los duros momentos yo estaba fuera, en cliente, es un grupo al que le tengo mucho aprecio y admiración. Admiración por ver como se ha reinventado Valentín, y sigue adelante con su editorial minobitia.es. Admiración por el arte que derrocha Bernardo, siempre creando exposiciones impactantes como Future Nature. Admiración por la versatilidad de Óscar, un referente en cualquier disciplina web, y amante del rugby como yo.
Por todo lo que he aprendido de ellos, por su honestidad para conmigo, y por traerme tantos buenos recuerdos de una gran época, solo puedo decir una cosa: gracias camaradas…