Empezamos el blog con la casa rural de los Porreros Muertos, pero como no tenía todavía forma definida, al final no lo reflejé como se merecía… Pero os insto a visitar mi segundo post…
Luego, vino la casa rual con la familia, la Amarata. Ahí ya tenía claro como iba a ser la estructura de las publicaciones…
Y ahora, cerramos el ciclo de casas rurales con la casa rural de los matemáticos. Otro clásico del año. Y como vamos a hablar más de ellos, en esta entrada simplemente comentar que repetimos casa, una que nos gustó mucho porque se adaptaba perfectamente a nuestras necesidades. Para mí el patio, espectacular. Si el tiempo te acompaña, es un jardín con barbacoa ideal para nosotros, y sobre todo para que los pequeños disfruten al máximo… Porque dentro se ponen un poco nerviosos 🙂