Hoy 7 de noviembre, aparte de que el Tigre y Aleja celebren su aniversario de bodas, es también el aniversario de la primera vez que cruzamos el charco. Concretamente, hoy se cumplen diez años del maravilloso viaje a New York.
Un viaje alucinante que me impresionó mucho más de lo que esperaba. Las expectativas de ser un gran viaje eran altas, pero también esperaba encontrar mucho tópico y mucha pose. Pero lo que encontré fue autenticidad y magia. Un sitio singular, lleno de contrastes y de mezcla de culturas. Espectacular. Sus edificios, sus calles, sus museos, sus parques, sus gentes… Fuimos un grupo grande de gente, en el que solo conocíamos bien a Ana y JuanPe, pero volvimos con más amigos: Ana, Rafa, Silvia, Rubén…
Para la imagen, he elegido una como la que preside nuestro salón, hecha desde el mismísimo Empire State Building. Podemos ver el Edificio Flatiron, la Quinta Avenida, y la zona de Wall Street al fondo, todavía con el hueco de la Zona 0. Teníamos que decidir si comprar los muebles y el sofá, o irnos a New York…
La elección estaba clara. No sabíamos si algún día podríamos volver, pero estábamos seguros que alguna vez compraríamos esos muebles. En recuerdo de esa acertada elección, hicimos un lienzo en blanco y negro de una foto similar 🙂